Toda vida
debe ser respetada, toda vida merece ser respetada, y no hablo solo de vidas
humanas, hablo de cualquier forma en la que se manifieste vida.
Nos despierta
una profunda congoja los atentados en las principales ciudades del mundo, cuyas
imágenes inundan los medios de comunicación y las redes sociales, pero no somos
conscientes de la cantidad de víctimas inocentes que cada día pierden la vida
como consecuencia de la desigualdad, de la opresión, de la ambición de poder y de
dinero.
Tal vez nos
solidarizamos más con lo que nos identifica, la mayoría de nosotros vivimos en
ciudades que fueron o pueden ser objetivos de atentados, y en esa visión parcial
de la realidad tomamos partido, y nos quedamos solo elevando oraciones por las
victimas que reconocemos como tales.
Arrasamos la
tierra en busca de metales.
Contaminamos
las aguas para obtener minerales.
Cubrimos el aire
de humo de industrias que contaminan.
Talamos
bosques que oxigenan la tierra eliminado especies que se pierden para siempre.
Ni siquiera
somos conscientes cuando imprimimos algo que ese papel algún día fue árbol, y
termina, tal vez, en una bolsa de plástico donde jamás será reciclado.
Disculpen,
pero no puedo ser indiferente a lo que sucede, y reconozco que los atentados
llamaron mi atención para poner en mi mente y en mis palabras estas injusticias
de las cuales muchas veces soy parte como consumidor de productos nacidos en el
sufrimiento de alguna especie que fue sacrificada para saciar deseos de
consumo. Parte por consumir productos manufacturados por personas oprimidas en
talleres clandestinos o bajo regímenes laborales esclavizantes.
Hoy pido una
oración por todas las víctimas inocentes que mueren en el planeta de la forma
que sea.
Pido una oración
para todas las almas de las vidas que desencarnan injustamente.
Y pido que reflexionemos
nosotros mismos para ver que podemos cambiar para dejar de ser parte de toda manifestación
de violencia, de opresión, de injusticia.
No esperemos
el cambio en otros, seamos nosotros el cambio.
Que ninguna
muerte haya sido en vano.
Que todas
las almas se puedan elevar.
Ale Flores
15 de
Noviembre de 2015
La Merecida
Silla Azul
Espacio
Sagrado
Altar de
Fuego
Podes escuchar este texto que fue leído en las radios el 17 de Noviembre de 2015.
Versión Hector Rossi, Radio Pop:
Versión Mario Mundo, Radio 10:
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